miércoles, 2 de enero de 2019

Poderosa sanaciones de los angeles de la curacion


 

(Habla el amado Rafael, Arcángel del Rayo Verde)

Los saludo en la radiación del Gran Poder del Dios Uno. Les hablo en nombre del Reino Angélico. Como respuesta a su pregunta sobre Los Ángeles de La Curación, les digo lo siguiente: Todo tiene su finalidad, su causa en el amor. Hay inmensas legiones de Ángeles con la misión de curar. Su servicio consiste en ser equilibradores de la armonía en La Creación. Todo cuanto existe, si vibra en armonía, manifiesta salud y belleza; pero, al haber disonancia armonía no acorde con la armonía reinante en el Cosmos, entonces, se produce lo que ustedes llaman enfermedad, lo cual no es sino una distorsión energética en el fluir constante de esa misma energía generada por la mente y el sentimiento personal.

Si ustedes cuidaran más de sostener el equilibrio mental-emocional, mantuvieran bajo control sus pensamientos y emociones, entonces, gozarían de buena salud continuamente. Nosotros, sus hermanos de La Hueste Angélica, estamos siempre presente en los hospitales y centros de atención médica. Cuantos más seres humanos conozcan, acepten esa asistencia, más rápida, amplia y segura podrá ser nuestra ayuda.

Los seres que laboramos en el Quinto Rayo de La Curación irradiamos y proyectamos mucha luz para beneficio de la salud, bienestar, curación de la humanidad y también a nivel de toda La Creación.

Si buscan la sanación por medios externos, raramente la encontrarán, porque la fuente es interna, energética. Sepan que, con sólo aquietarse y unirse a Yo Soy, todo lo que no sea igual a su perfección se irá por Ley de Vibración. Cualquier condición no armoniosa que llegue a sus vidas sucede porque ustedes mismos le han dado entrada y así lo permiten.

Vigilen el Gran poder de La Atención, no se descuiden en eso, porque son muchas las apariencias de enfermedades que llegan como consecuencia del mal uso de la atención. La curación tan anhelada y respetada en el plano físico, a nivel de sus médicos, sería mucho más eficaz si dieran el mando al Yo Divino en lugar de poner la atención en el Intelecto y hacer del sublime arte de sanar una mera destreza técnica sin ningún reflejo de amor.

Hoy, ya están descubriendo el maravilloso poder de sanar por medio de las altas energías del pensamiento humano unido a La Divinidad, en contacto con Las Altas Dimensiones de Luz donde nosotros estamos y ayudamos amorosamente a quienes así lo demanden. Los Ángeles de La Curación sirven en el Quinto Rayo y son muchísimos. Siempre que su asistencia requerida a través de la oración y la invocación, allí ellos están para fortalecer y ayudar. La curación es un estado de gracia mediante el cual las personas se reconcilian con la paz, la armonía, el equilibrio, porque todo vibra por la acción del Amor. Si la nota emitida es armónica, el ser humano vibrará también en octavas de bienestar; pero si, por el contrario, manifiesta falta de armonía, reflejará apariencia de enfermedad.

Toda curación proviene del mismo ser cuando el individuo ha dejado atrás sus aparentes limitaciones. Nosotros, desde Arriba, les infundimos la confianza en el Poder Interno que todo lo resuelve. Cuando manifiesten apariencias de falta de salud, deben invocar nuestra asistencia. Nosotros seremos el puente tendido entre ustedes y la fuente de done proviene toda curación. El día en que los médicos del plano reconozcan y acepten esa fuente, se asombrarán de los resultados obtenidos. Recuerden que la llave maestra es siempre el Amor redentor que todo lo eleva y armoniza.

¿Como realizan su trabajo Los Ángeles de La Curación?

Estos seres han desarrollado el Amor Divino altamente, poderosa energía que, debido a su acción vibratoria, une los átomos y células en los órganos que manifiestan apariencias de desajuste y falta de salud. Los Ángeles Sanadores tienen facultades, condiciones innatas para curar, lo cual hace que superen toda clase de obstáculos y dificultades. A través de sus chacras ubicados en las manos, irradian potente energía purificadora en unión con su Padre, en respuesta a las peticiones de asistencia y ayuda.

Dichos Ángeles poseen también un alto Poder de visualización que utilizan en forma positiva para restablecer el orden en el funcionamiento y movimiento de los átomos, células, tejidos y órganos. Todas esas facultades, unidas al deseo de sanar que tiene el enfermo, al optimismo y ansia de superación, dan como resultado la recuperación sentido intensamente, junto con la orden mental de sanar, puede producir muy buenos y maravillosos resultados en quienes están enfermos.

viernes, 28 de diciembre de 2018

La Clinica del Señor



Fui a la clínica del Señor a hacerme una revisión de rutina y constaté
que estaba enfermo:

Cuando Jesús me tomó la presión, vio que estaba bajo de ternura.
Al medirme la temperatura, el termómetro registró
 40º de ansiedad.
Me hizo un electrocardiograma y el diagnóstico fue que necesitaba varios by pases de amor,
 porque mis arterias estaban bloqueadas de soledad y no abastecían a mi corazón vacío.

Pasé a ortopedia, ya que no podía caminar al lado de mi hermano, y tampoco podía dar un abrazo fraternal porque me había fracturado al tropezar con la envidia.

También me encontró miopía, ya que no podía ver más allá de las cosas negativas de mi prójimo.

Cuando me quejé de sordera, Jesús me diagnosticó que había dejado de
escuchar su voz cada día.

Es por esto que hoy Jesús me ha dado una consulta gratuita y gracias a su gran misericordia, prometo que al salir de esta clínica tomaré solamente los medicamentos naturales que me recetó a través de su verdad:

Al levantarme,
beber un vaso de agradecimiento
Al llegar al trabajo,
tomar una cucharada de paz
 A cada hora,
ingerir un comprimido de paciencia
y una copa de
humanidad
Al llegar a casa,
 inyectarme
una dosis de amor
Y antes de acostarme,
tomar dos cápsulas de conciencia tranquila
No te deprimas ni te desesperes
ante lo que estás viviendo hoy.

Dios sabe cómo te sientes. 

Dios sabe perfectamente
qué es lo que está permitiendo en tu vida, 
justamente en estos momentos
El propósito de Dios para contigo es admirablemente perfecto.
Él desea mostrarte muchas cosas que solamente comprenderías estando en el lugar donde actualmente estás ahora y en la condición que vives en dicho lugar.

Cinco poderosas oraciones para diferentes propositos y necesidades





I

Dios de poder y de misericordia, bendeciste las Américas en el Tepeyac con la presencia de la Virgen María de Guadalupe. Que su intercesión ayude a todos, hombres y mujeres, a aceptarse entre sí como hermanos y hermanas.

Por tu justicia, presente en nuestros corazones, reine la paz en el mundo. Te lo pedimos por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo y el Espíritu Santo, Dios, por los siglos de los siglos. 
Amén.

II


Santa María de Guadalupe, Mística Rosa, intercede por la Iglesia, protege al Soberano Pontífice, oye a todos los que te invocan en sus necesidades. Así como pudiste aparecer en el Tepeyac y decirnos: "Soy la siempre Virgen María, Madre del verdadero Dios", alcánzanos de tu Divino Hijo la conservación de la Fe. Tu eres nuestra dulce esperanza en las amarguras de esta vida. Danos un amor ardiente y la gracia de la perseverancia final. 
Amén.

III


Virgen Santísima de Guadalupe, Madre de Dios, Señora y Madre nuestra. Venos aquí postrados ante tu santa imagen, que nos dejaste estampada en la tilma de Juan Diego, como prenda de amor, bondad y misericordia. Aún siguen resonando las palabras que dijiste a Juan con inefable ternura: "Hijo mío queridísimo, Juan a quien amo como a un pequeñito y delicado," cuando radiante de hermosura te presentaste ante su vista en el cerro del Tepeyac.

Haz que merezcamos oír en el fondo del alma esas mismas palabras. Sí, eres nuestra Madre; la Madre de Dios es nuestra Madre, la mas tierna, la mas compasiva. Y para ser nuestra Madre y cobijarnos bajo el manto de tu protección te quedaste en tu imagen de Guadalupe.

Virgen Santísima de Guadalupe, muestra que eres nuestra Madre. Defiéndenos en las tentaciones, consuélanos en las tristezas, y ayúdanos en todas nuestras necesidades. En los peligros, en las enfermedades, en las persecuciones, en las amarguras, en los abandonos, en la hora de nuestra muerte, míranos con ojos compasivos y no te separes jamás de nosotros.

IV

Virgen de Guadalupe, Madre de América. Tiende tu protección sobre todas las naciones del Continente y renueva su fidelidad a Cristo y a la Iglesia. Suscita propósitos de equidad y rectitud en sus gobernantes. Protege a los hermanos de Juan Diego para que no sufran discriminación. Cuida a los niños. Guarda la unidad de las familias... Que desde esta tu Imagen manifiestes siempre tu clemencia, tu compasión y tu amparo. Te lo pedimos por Jesucristo, nuestro Señor. 
Amén.

V

Virgen Santísima de Guadalupe, Madre y Reina de nuestra patria. Aquí nos tienes humildemente postrados ante tu prodigiosa imagen. En Ti ponemos toda nuestra esperanza. Tu eres nuestra vida y consuelo. Estando bajo tu sombra protectora, y en tu maternal regazo, nada podremos temer. Ayúdanos en nuestra peregrinación terrena e intercede por nosotros ante tu Divino Hijo en el momento de la muerte, para que alcancemos la eterna salvación del alma. 
Amén.